| Smash regresa después de su versión portátil para demostrar por qué es el rey de los multijugador locales. Después de dos años de desarrollo, Sakurai y compañía insisten en que se trata del mejor título de toda la serie. ¿Será eso cierto?
Lo bueno
Lo no tan bueno
Historia Este apartado lo utilizaré para mencionar que el juego carece por completo de historia. Atrás quedó el Emisario Subespacial de Brawl, rico en excelentes cinemáticas las cuales fueron dejadas de lado para agilizar el progreso de desarrollo del título. Es comprensible, pero con tantos universos a su disposición no se puede evitar desear historias que relacionen a los personajes de Earthbound con los de Metroid, por dar un ejemplo. Jugabilidad Siendo honestos, sabemos que la mayor parte de tu tiempo la dedicarás al multijugador con tus amigos y de ser así quedarás ampliamente satisfecho. En Super Smash Bros. for Wii U regresan los combates por tiempo, vidas y monedas con algunas modificaciones; por ejemplo, en las peleas con tiempo puedes activar la opción de saber quién se encuentra a punto de ganar y en la de vidas agregar tiempo límite, cambiando de manera significativa la forma de jugar.
Dentro de los cambios está también la cantidad de personajes seleccionables, agregando caras nuevas que nos remontarán a los años ochenta y otros pertenecientes a títulos más recientes. A Duckhunt es todo un gusto observarlo(s) en acción, con ataques a distancia que fastidiarán al resto de los jugadores; Little Mac podría ser considerado roto a primer instancia hasta que te das cuenta de que su debilidad es el ataque aéreo, y así podríamos seguir con otro de los personajes nuevos a excepción de los clones. Así es, personajes de tipo clon regresan a Smash, entre ellos Dr. Mario, Lucina y Dark Pit, ocupando lugares que idealmente podrían haber sido utilizados por otros más solicitados como es el caso de Ridley (relegado a cameo bastante molesto en uno de los escenarios) o Chrome.
El modo clásico para un jugador sufre modificaciones que verdaderamente no le sientan para nada bien. Mientras Melee (y el resto de la serie) trataban de simular la experiencia arcade, la versión de Wii U trata de agregar variedad seleccionando a qué oponente te enfrentarás a la vez que elimina desafíos intermedios tan memorables como romper los blancos o recorrer un laberinto diseñado para aprovechar las habilidades del personaje elegido. Algo que me sigue inquietando es la insistencia por parte de Sakurai de dejar a un lado aquel maravilloso modo aventura que debutó (y quedó relegado) en Melee, donde podías resolver acertijos en escenarios inspirados en Zelda, correr de una explosión al más puro estilo de Metroid y saltar plataformas en el reino champiñón, todo con enemigos y música de las franquicias de donde se tomaron. Se cuenta con modo All-Star, estadio y eventos, pero no llenan por completo el espacio que anteriores entregas supieron hacerlo muy bien.
Después del criticado modo en línea de Brawl (también de cierta forma en la versión de 3DS que llegó en Octubre), Namco se puso a toda marcha para entregarnos conectividad fluida similar a la de Soul CaliburV. En poco más de 20 partidas, admito que ninguna de ellas sufrió de problemas de conexión o ralentizaciones, casi llegando al punto de sentir que en realidad se trataba de juego local. No todo era malo en Brawl, el juego agregaba los Smash Finals a los ataques disponibles, inteligentemente cambiando la forma en que la mayoría nos comportamos en la partida: cuando aparece la bola Smash, todos van detrás de ella por instinto. En Super Smash Bros. for Wii U está la modalidad para 8 jugadores pero la diferencia está en que, mientras los Smash Finals son vistos prácticamente en todas las peleas, las de 8 jugadores serán bastante difíciles de planificar, habiendo quien sí aproveche este modo pero que serán la minoría de usuarios (además de que por defecto se limitan las opciones como los escenarios). Por ende esta versión de Wii U agrega, pero no lo suficiente para destacar de sus predecesores. Presentación Si eres seguidor de Nintendo y tu última consola fue un Wii, seguramente quedarás boquiabierto con el acabado gráfico de este juego de peleas. Los detalles de las animaciones se incrementaron con el salto de generación pero en algunos casos a costa de la velocidad con la que se ejecutan los movimientos.
Los escenarios son más dinámicos y si es de tu preferencia jugar en el escenario Final Destination, disfrutarás que ahora todos los otros tendrán un modo que simula la arena donde sólo los valientes se enfrentan. Si por otro lado, ya contabas con PS3 o Xbox 360, el salto a la nueva consola no será tan impresionante e incluso podrías considerarlo “normal” por lo que el cambio gráfico es realmente subjetivo. La velocidad en cuadros por segundo trata de mantenerse en los 60 pero cuando aparecen muchos objetos en pantalla ésta puede disminuir brevemente. De aplaudir son los tiempos de carga (un aspecto en que WiiU siempre ha tenido problemas), difícilmente mayores a 3 segundos e incluso menores que su versión portátil.
Como queja menor he de mencionar que siendo que desde su anuncio en E3 lo que sobraban eran cinemáticas en FMV para promocionar tanto el lanzamiento como los nuevos personajes, es de extrañar que la escena de introducción sea relegada a un collage de los anteriores y no a material inédito/con mayor armonía. Conclusión Siempre hay aire de emoción rodeando al lanzamiento del siguiente Smash, pero por alguna razón esta vez fue diferente para mi. Opino que los (pocos) cambios no son suficientes para justificar esta versión, aún más cuando consideramos que los agregados deberían ser tantos que obliguen a una sola entrega por consola. El título como he mencionado es extremadamente pulido, pero bien se habría podido retrasar algunos meses para asegurar contenido para todo tipo de jugador. Es una compra obligada para quien tenga un Wii U ya que a final de cuentas cumple su objetivo, pero tampoco está mal haber deseado más de una serie que tiene para darlo y de sobra.
Este escrito representa únicamente la opinión de su autor y no necesariamente la del equipo de Versus Media. |
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